Jordi Peris, candidato de VALC a la alcaldía, se reúne con la Unió de Llauradors con el objetivo de escuchar y recoger las demandas del sector
Jordi Peris se ha reunido en la sede de la Unió de Llauradors con Ramón Mampel Dellà, secretario general, y Joanma Mesado Martí, secretario técnico. Juntos han analizado la problemática del sector y Peris ha recogido las demandas de sus interlocutores a la vez que les transmitía los proyectos de València en Comú para la huerta valenciana. La apuesta de VALC es traer la huerta a la ciudad y garantizar su sostenibilidad.
Tanto Jordi Peris como la Unió de Llauradors han coincidido en la necesidad de una concejalía de Agricultura y han lamentado el hecho de que “la gente del común no tiene en su cabeza una imagen de la huerta”.
El candidato de VALC a la alcaldía ha escuchado las propuestas que este sector ha venido trabajando, como Valencia Kilómetro Cero, una propuesta para incentivar el consumo de productos de proximidad, de calidad y ecológicos.
Peris y sus interlocutores han coincidido también en la necesidad de traer la huerta a la ciudad a través de diversas medidas que tienen que ver con la promoción de los productos de la huerta o los menús ecológicos en los comedores escolares, todo ello “como una apuesta por los mercados de proximidad y una lucha contra el cambio climático”. Además, se ha subrayado la conveniencia de realizar campañas de sensibilización “que permitan recuperar y crear una cultura alimentaria en la que los productos de la huerta ocupen un papel privilegiado”.
Otras propuestas han sido crear una guía turística en la que se incluya los restaurantes en los que se utilicen productos de la huerta y diversificar los usos de la huerta para garantizar su sostenibilidad ya que, según Jordi Peris, “proteger la huerta es proteger a los labradores”. En este sentido, Peris ha instado a “trabajar juntos para construir una imagen de la ciudad que incorpore el patrimonio identitario y productivo de la huerta”.
Jordi Peris opina que la complicada situación de la huerta de Valencia se debe al PGOU, que “es una aberración cuando ya existe un plan consensuado entre los diversos actores y que no ha sido tenido en cuenta por la administración del PP”.